Santa Teresa de Jesús (Teresa de Cepeda y Ahumada) es una de las grandes personalidades del siglo XVI en España. Nacida en Ávila en el año 1515, ingresó en la Orden del Carmelo en 1534. Sus frecuentes visiones místicas y su ansia de mayor perfección espiritual la llevaron a emprender la reforma de su Orden, que había relajado el rigor de la Regla. Así, con aprobación de Pío IV, comenzó su Reforma. En 1562 fundó el primer Carmelo Descalzo: San José de Ávila.
Mujer dotada de una férrea voluntad y una capacidad de trabajo sorprendente, prosiguió su obra, en la que no faltaron oposiciones, disgustos y ofensas; pero también apoyos, como el de San Juan de la Cruz. En 1582, fecha de su muerte en Alba de Tormes, había fundado 32 conventos, 17 femeninos y 15 masculinos.
Como escritora es considerada la primera mística española, con poesías de llana composición y hondo espíritu. Sus libros de prosa (Las Moradas, Camino de Perfección, etc.) enseñan hasta dónde puede remontarse el alma en alas del misticismo.
Beatificada en 1614 por Paulo V y canonizada en 1622 por Gregorio XV, su fiesta se celebra el 15 de octubre (aunque murió el 4 de octubre. Esto se explica porque el papa Gregorio XIII decidió adelantar 11 días el calendario utilizado desde época de Julio César, y que presentaba ese desfase con respecto a la fecha del equinoccio de primavera). El papa Pablo VI la declaró en 1970 Doctora de la Iglesia, siendo la primera mujer a quien la Iglesia concedió este título.
Santa Teresa estuvo en Malagón en seis ocasiones. La primera vez que vino a Malagón fue el 1 de abril de 1568, para hacer la Fundación, junto con su amiga Doña Luisa de la Cerda, I Señora de Malagón, la que insistió a la Santa para que fundase en Malagón. Cuenta la tradición que en esta ocasión, y buscando un lugar adecuado para edificar el Convento, visitando uno de los olivares de Doña Luisa, Santa Teresa vio posarse una paloma sobre uno de los olivos, interpretando aquél símbolo como una señal, decidiendo poner en aquel lugar el Sagrario de la iglesia, articulando en torno a ella el resto del Convento. Las sucesivas visitas que la Santa hizo a Malagón están recogidas en 6 tablillas conmemorativas que se encuentran en el zaguán del Convento.
Malagón siempre ha honrado de manera muy especial a Santa Teresa. En el año de su Doctorado, mediante cuestación popular, se erigió el monumento que preside la Plaza del Remedio, en bronce, que representa a la Santa sentada, escribiendo, obra del escultor manchego Joaquín García Donaire. Otro lugar emblemático de la devoción teresiana en Malagón es “la piedra de la Santa”, pequeña hornacina enrejada, enfrente al Convento que alberga la piedra en la que, según la tradición, la Santa se sentaba a dirigir las obras del Convento. Aquí acuden los malagoneros a traer sus oraciones y súplicas a la Santa, y es costumbre, al pasar por delante de la piedra, santiguarse.
Con ocasión del V Centenario del Nacimiento de Santa Teresa de Jesús, celebrado en 2015, se han colocado tres monumentos, que marcan los lugares teresianos en Malagón: el primero, una imagen sentada de la Santa, sobre una piedra y junto a un olivo, en la plaza del Convento. Otro, en la Glorierta 23 de junio, lugar en el que se encontraba la plaza pública de la villa en época de Santa Teresa y en la que estuvo situado provisionalmente el Convento de Carmelitas. Y la última, un relieve que rememora el traslado del Santísimo Sacramento a la fundación, el 11 de abril de 1568, con la presencia de Doña Luisa de la Cerda y de la propia Santa Teresa.